sábado, 12 de abril de 2008

__S-O-Ñ-A-R__


Hoy día me desperté estúpidamente feliz. Cuando tomé conciencia de que mis ojos estaban abiertos me estaba riendo, algo bastante extraño, ya que en las mañanas suelo quejarme por el hecho de tener que despertar. No sé por qué, pero todos los días me levanto enojada. Es como cuando faltan unos minutitos para el almuerzo, el desayuno o la once y me enojo, porque tengo hambre.
Soy un ser bastante extraño al parecer...
Meditando este increíble suceso (el increíble es para ponerle emoción, la verdad es que no tiene nada de estrafalario) se me prendió la ampolleta y me iluminó esta frase cual filósofo de la Ilustración... Quizás me guste soñar...
mmm... Sí, lo reconozco el 99,9% del día ando volando en una dimensión desconocida y eso hace que los porrazos sean más fuertes cuando caigo de las alturas.
Recuerdo a la conclusión maestra que llegamos con la Carla afuera del Gimpert el jueves; La vida es más fácil vivirla drogada, pero es más emocionante vivirla lúcida.
Creo que esa frase me representa.
Me gusta sufrir, me gustan los retos, por eso soy un poco (?) obsesiva.
Sufrir, vivir...Son la esencia para crear...
Debo aceptarlo, he tenido semanas para planear informes, hacer trabajos y no he hecho nada productivo. Necesito presión!!!. Me he dedicado a buscar mil maneras para decir lo mismo, mil veces lo niego, y mil veces de nuevo vuelvo a buscarlas...Talvés la respuesta a esa gran pregunta apareció por arte de magia en mis sueños y por eso desperté feliz. Instantánea e idiotamente se me olvidó, como suele ocurrir con todas las cosas que debo recordar...
Ahora tengo rabia, porque las cosas nunca resultan como yo quiero que resulten, porque siempre hay que aparentar para ser aceptada, porque mi verdad no es la verdad de otros y por supuesto, porque no puedo decir algo que tengo atragantado desde hace tiempo...
Enseguida siento pena y nostalgia...No es precisamente por algo que sienta sino por la canción que suena de fondo...
En fin. Mejor escribir para soltar los demonios que aprietan los sesos, aunque esté perdiendo mi esencia y este blog se esté llendo a la cresta...
Sigo soñando que las cosas pueden cambiar...